Lo tomo entre sus manos
el fruto de su manantial
la cosecha de un sueño
la semilla germinada
en esa tardía noche de verano
sintió su piel
la otra piel
aquel desprendimiento
y la plenitud de ese encuentro
Lo tomo entre sus manos
el fruto de su manantial
la cosecha de un sueño
la semilla germinada
en esa tardía noche de verano
sintió su piel
la otra piel
aquel desprendimiento
y la plenitud de ese encuentro
“
;
el infierno son los otros” (Sartre).
Yo veía en el horizonte
un lugar donde llegar
ella veía la bruma
en aquel firmamento
él una luz brillante
en esa lejanía
ellos en el mismo confín
la autocrática línea del partido
según de qué lado estás
ves un seis o un nueve
u otra cosa…
Me place enseñar y aprender por ello celebro de igual manera
el día del profesor y el día del estudiante.
Disfruto de las actividades lúdicas, en particular de los
deportes con pelotas sean estos individuales o colectivos; también incluyo al
ajedrez en la categoría de deporte mental. Agrego esa sensación de libertad de
andar en bicicleta o caminar, estar en contacto con la corporeidad en el
sentido amplio del término cuando asisto a una clase de yoga o de técnicas
corporales. También la ingravidez de nadar y toda la riqueza perceptiva de
estar en el agua, disfrutar de la naturaleza y de las ricas, diversas y amplias
relaciones humanas que estas actividades generan.
Cultivo las tertulias, las reuniones de café, el arte de la
conversación, el maravilloso intercambio de ideas y experiencias de la vida.
Me gusta escribir, además de la docencia la considero mi
segunda profesión, la ejerzo vocacionalmente sin la prisa de las necesidades
materiales. Para completar la diada no podría estar ausente el universo de la
lectura.
Estoy predispuesto a pensar que la idea y el amor son
las pasiones más claras y elevadas,
sentir y pensar son indisolubles. Entiendo la palabra amar como una facultad,
actitud, necesidad profunda, también como construcción y como un legado. Valoro
trabajar en lo que se ama y estar con quién amamos.
Elijo más las preguntas abiertas que las respuestas cerradas,
tener proyectos y metas y mientras se transitan disfrutar del proceso aunque
algunos se concreten y otros no.
A pesar de los vaivenes económicos que el mundo nos depara,
aún en las épocas de vacas flacas siempre tuve lo justo y necesario y soy
agradecido por ello, a veces tenemos más de lo que necesitamos.
En cuanto me es posible me alejo del ruido, las estridencias
y las expresiones disonantes, me irrita al igual que un músico las notas
desafinadas, en mi caso parecida sensaciones tengo con el maltrato del lenguaje.
Intento honrar las palabras, y fondo y la forma son dos conceptos que van de la
mano.
Este es un pequeño biografema de mis cosas esenciales,
destellos y fragmentos que orientan mis
sentido(s).
Los alumnos del
profesorado me miraban sorprendidos, otros se ruborizaban por mi atrevimiento cuando en
la parte final de la clase, en los cinco minutos últimos, me dedicaba a leerles
o recitarles un cuento, un poema o una parábola breve. Incluso algunos murmuraban
por mi extraña predilección.
Con el tiempo la palabra les fue penetrando con la suavidad
de sus encantos, al cabo de un tiempo me pedían ese espacio mágico que
despertaban el ritmo, la repetición, la exageración, el asombro, la sorpresa de
la última oración, esa alquimia de un universo inexplorado.
Quiero creer que algunos
se enamoraron de la palabra…
A veces las loterías sacan algunos números oscuros, nuestra
suerte está en el mismo bolillero. Yo no conozco los laberintos del destino ni
los dados de mi genética. A veces en esos inciertos días sostenemos el mismo
suspenso…
…
El tiempo debería tener ciertas potencialidades, con cierto
tiempo podríamos de decir que una bronca no era tan importante, aunque si lo fuera, el mismo tiempo nos podría preguntar ¿hasta
dónde continuarla? Los existencialistas dicen que siempre se puede elegir…
Hace unos días regresé, afortunadamente por poco tiempo, a
una guardia médica, la misma que hacia algo más de veinte años no visitaba,
aquella vez con características más traumáticas. Entonces me pregunté: ¿Me he
olvidado de aquella experiencia? ¿La he superado? ¿La he olvidado? ¿O el cuerpo
y la mente se protegen del dolor y el sufrimiento…
***
Pobreza(S).
Un señor sin ponerse colorado expresa –Siempre hubo pobres-
Otro agrega: -y siempre los habrá-
Un tercero dice: -los pobres siempre serán pobres-
Un cínico sentencia: - Los pobres tienen la culpa de ser
pobres-
Y el más terrible: -los pobres son criminales-
***
Deambulan más mentiras que verdades y el resto no se
difunde.
***
Un cartonero apila sus cansancios
en su viejo carrito de tristezas
décadas de años he visto los primeros
hoy millones gambetean el mismo hambre
a pocos metros una familia completa
comparte el mismo trabajo
a veces los miro de lejos
para no fotografiar su impotencia
yo mismo me acerco y me alejo
del dolor de su cuerpo y aquellos sufrimientos
algunos completan un trabajo de medio tiempo
ciertos hipócritas los miran con desprecio
jubilados niñas niños adolescentes adultos
la justicia no se
preocupa por las edades y los géneros
el gobierno publica es decir publicita
que ha bajado la inflación el riesgo país
el déficit fiscal y hasta ha aumentado el salario
¿por qué los carritos siguen saliendo?
Cuando recuerdo mi niñez
siento el cuerpo con energía
aquella adrenalina de mil juegos
una carrera de baranda a baranda
en la cancha de básquet
los desafíos físicos
las temerarias aventuras
caídas moretones heridas
osadías luchas cinchadas
trepar en los angostos pasillos
el asalto al tranvía
ráfagas de viento en la cara
cañita voladora, globo al aire
mi recuerdo es físico, corporal, carnal
el recreo eran los sabores de la cocina
mi abuela y mi madre en su alquimia
agitaciones corridas sudores
en el movimiento se sentía la vida
veloces bicicletas patines
pelotas de trapo o de goma zancos
…
embriagado de fatigas
el corazón rápido latía
y esa libertad por todos lados sentía
A Mónica
Alfonso
Comparto y disfruto ese encantamiento de la palabra, las
desobediencias y las rebeldías de la infancia y de otras invisibles que creo
que sostenemos. Relatos, cuentos y reflexiones donde juega el lenguaje sin
competencias entre la prosa y la poética, esas dos amigas que se encuentran.
Imagino sus
silencios, sus posturas, sus gestos, el goce, el ritual de limpiarse los
cristales de sus lentes, antes de escribir o leer en “La hora del cuento”.
Preguntas, tránsitos, miedos, las decisiones, la muerte y el
renacer de algunos paradigmas y enseñanzas, el formato religioso, los pecados,
la emancipación de estar descalzos por
un tiempo… el infinito universo de las letras.
Me identifico con las palabras con el clima de época de la niñez, expresiones,
dichos, costumbres, las fiestas, los afectos familiares…
A los relatos los imaginaba en un teatro con un formato
unipersonal, el cuerpo de la letra en escena, la escritura y la actuación, a
sabiendas que las palabras son ficción y no ficción
Empatiso con esa cosas porque las siento.
(*) Del libro “Reflexiones desobedientes: relatos descalzos”
de Mónica Alfonso
57577 sílabas.
En su métrica
procura ser sencillo
sentir y pensar
despojado de brillos
se descubren tus pieles
Niñez
Era inquieto
rebelde temerario
aquella niñez
aventurera feliz
juego y placer sin fin
La palabra me desnuda
ella juega con mis duendes y fantasmas
lima mis asperezas
escribe en mi piel
aquellas impresiones
en los borradores del escritorio
en los cuadernos gastados
y también en los nuevos
en las servilletas de las tertulias
en los apuntes de una reunión
cuando llueve en mis jardines
cuando prendo las velas de mis sótanos
cuando me sonríen los días
y en aquellos incómodos
siempre busca expresar lo indecible…
darle un nombre a una emoción extraña
La necesidad de autorrealización no implica exacerbar el
ego, la vanidad. Es importante empoderarse y al mismo tiempo aprender humildad.
***
Hay personas que reducen su vida a cuánto tienen, a cuánto
compran y a cuánto venden…Siempre te recuerdan la lista de sus bienes. Algunos
de tanto enriquecerse se olvidaron de compartir, concentrados en ese paradigma
algunas virtudes se van perdiendo.
***
Las condiciones del clima y de los caminos siempre cambian.
***
Es bueno preguntarse de tanto en tanto ¿Cuál es tu nivel de
generosidad?
***
A la escuela también debería ir el Inconsciente, el Cuerpo y
el Respeto.
***
Si no conviven lo prosaico y lo poético la vida se torna muy
aburrida.
***
Aquella escritura
ha viajado cientos de millas
lo sigue haciendo
ese barquito de papel
ha cruzado todos los mares
lápiz papel y aquella magia del viento
Un block de apuntes
un diario de reflexiones
libros muchos libros
biromes fibrones y tizas de colores
un biografema siempre actualizado de experiencias
un diccionario general y uno etimológico.
un diccionario práctico de antónimos y sinónimos
y si fuera posible conseguir:
pastillas para la humildad, la curiosidad y la osadía
…
Mediados
de Noviembre de 2024.
Con el mismo impulso inicial con que empiezo cada clase, con
parecidas energías y disposiciones, cada grupo responde a su manera.
Hay algunos que sintonizan una parecida corriente de
afectos entre el maestro y los aprendices, aunque el
primero en cierta manera también lo es, en el sentido que enseñando reaprende
lo aprendido y hasta a veces desaprende por que el conocimiento ha envejecido,
aquellas certezas ya no se sostienen y el mismo docente tiene la necesidad de
renovar su propio aprendizaje.
En esos casos nos enamoramos más de los saberes, lo
degustamos de otra manera, sentimos un goce y una pasión por lo que hacemos y
compartimos, y esto incluye el amor por nuestras alumnas y alumnos. El aula
trasciende sus límites y se enseña y aprende también en los márgenes, en un
encuentro casual en una galería o subiendo una escalera y así el afuera también
resulta una escuela y todo es formación aún los dolores que cada uno lleva.
En la alquimia de esa argamasa formada por diversos
materiales: verdad, respeto , humildad,
convivencia, participación, diálogo, circulación de la palabra, no exento al
uso de las letras (literatura); construimos aquel puente que nos une y al cabo
de un tiempo dejamos los andamios y más tarde entre pares continuamos la tarea a
sabiendas de aquella necesidad de seguirnos formando.
En esa complejidad de los vínculos, en un contexto
horizontal, la comunicación no es un
mensaje unidireccional, por el contrario es circular, va y viene y permitirlo y
ejercitarlo es darle una dimensión de política democrática a la tarea de ser un
facilitador de aprendizajes.
Ahora todos docentes, es el momento de suspender las creencias,
interpelar e interpelarse, descubrir sus puntos ciegos, la perenne tarea de la
formación.
Al fin de cuentas, es el “Eros” esa mezcla de deseo, placer,
goce y pasión por lo que hacemos.
“…la literatura como
autorreflexión del hombre en su universalidad…” Françoes Bon
“La
literatura no es un pasatiempo ni una
evasión, sino una forma, quizás la
más
completa y profunda , de examinar la condición humana. Ernesto Sabato
Es y no es ficción
alberga todo lo humano
los claros y los oscuros
inspira nos esculpe nos forma
es el refugio que nos cuida
nos alimenta con su letra
nos hace conocer muchas vidas
la complejidad de los vínculos y las relaciones
leer el mundo lo diverso lo universal
lo plural lo singular lo poético
está más allá de lo útil y lo pragmático
nos transforma en seres reflexivos
nos asombras con su efectos de sentidos
y en esa libre elección
nos enseña a ser libres
Me persiste ese perfume
que deja la palabra
lo llevo en la piel
lo siento en el aire
imagino las sedas
que traslucen su cuerpo
la seducción de sus miradas
la calle calma del renglón
la letra viva que se mueve
y salta la valla de sus márgenes
la inaprensible sortija
en la calesita del abecedario
me apasionan las tertulias
las elegidas de café
en los bares de neblinas
y otras inesperadas
el juego de perdernos y encontrarnos
en la magia de los vocablos
el lúdico encuentro de mirarnos
en el alfabeto de
nuestros sentidos…
Un eco de silencios la inundó
dejó de nombrar
olvido los adjetivos
también esos verbos
contempló su descanso
pensó -en aquellas lejanías
lo grande se hace pequeño-
suspendió sus traducciones
enmudeció no señaló ningún objeto
se alejó del canto
sin pistas ni señales
desdibujó su figura
y transitó invisible
sin ademanes ni gestos
ni siquiera sus huellas en la arena
escondida detrás de los márgenes
igual a un fantasma de blanco
ninguna sombra fue posible ver
tapó los tatuajes de su cuerpo
en la transparencia de su página
el lunes volverá de viaje…
¿qué dice este murmullo de olas?
¿y este dibujo abstracto de sales sobre el agua?
¿qué intenta expresar esta escultura?
¿qué hace el agua alisando una hoja sin renglones
en la playa?
¿Qué palabra invisible me ha dejado aquella huella que ha
borrado?
La mañana disipaba aquella oscuridad
incomodaba a los profundos silencios
mientras que el sueño se transformaba
en un despierto deseo
en ese instante singular
sentí que me incluía
en los plurales.
.Facultad
de hablar.
.Representación
gráfica de la palabra hablada. RAE
1.
Aquello
que nos humaniza y diferencia.
2.
El
puente que nos une
3.
El
remanso del río, el descanso en el camino.
4.
El
refugio de nuestras inclemencias.
5.
La
argamasa que construye conceptos, ideas
y emociones.
6.
Los
andamios de la confianza.
7.
Lo
que aglutina nuestros vínculos.
8.
Lo
que sana.
9.
Aquello
que nos define.
10. El eslabón de la convivencia.
11. Los hallazgos y placeres de las
tertulias.
12. La trama que teje nuestras
relaciones.
…
Los antónimos:
La lucha, la guerra, la grieta, el insulto, la
violencia, lo que enferma…
“Yo
no tengo una personalidad; soy un cocktail, un conglomerado,
una
manifestación de personalidades.
En
mí, la personalidad es una especie de forunculosis anímica en estado
crónico
de erupción…” Oliverio Girondo
(Espantapájaros).
“Los escritores tienen la capacidad
de ir hacia los roperos como en –Las historias
de Narnia- Graciela R.
No tiene nombre y aún no sé cómo llamarlo, nació después de
mi nacimiento, tal vez en mi niñez, no voy a conjeturar, el origen siempre es
un misterio.
Convive conmigo aunque en otra dimensión del espacio, lo
extraño es que es sincrónico con mi tiempo y mis circunstancias.
No siempre tengo conciencia de su presencia, sé que habita en
mí y a veces tiene la capacidad de transmutarse, salir de mi propio cuerpo
físico y mirarme con otros ojos a una cierta distancia.
Tiene una vida independiente, es más valiente y empoderado
que yo, tal vez más analítico y crítico, es además invisible, abstracto e inmaterial.
Es una sombra que me cuida, un perro que ladra en el sótano,
un sueño que me advierte o devela una pregunta, la memoria de otro –yo mismo-
algo más joven, un faro o una hoguera en una noche de niebla, un lector voraz,
un escribiente que me dicta versos mientras duermo, un girasol que mira el alba,
el techo de un refugio, esa lluvia fina, un hombre que lleva vivos y muertos en
su cerebro, alguien que aún ama desea
que sufre y se alegra, el viento en un día de barriletes, una palabra mágica
que abre los candados oxidados…
¿Estaba en su naturaleza o era producto de sus circunstancias? Desde una mirada existencial estoy predispuesto a pensar más sobre la primera que sobre la segunda posibilidad.
Hablaban el mismo lenguaje los unos y los otros, pero ninguno
de ellos se entendían, como si existiera en ambos una incapacidad de
decodificar las palabras, de poder dialogar y acordar una civilizada convivencia.
Había en aquel mundo de ficción dos cegueras, una blanca y
una negra, ambas eran cegueras.
Al alcance de mi mano sobre la mesita de luz estoica espera
una libreta de hojas blancas, el lápiz como un vigía explora el paisaje, ambos
esperan en silencio mi palabra.
Desconfía del poder, es muy propenso a la mentira y a la
manipulación. La historia se adapta a sus mandatos, sus estadísticas justifican
el ajuste perpetuo, la justicia coquetea con los influyentes de turno y tuerce
su balanza según las conveniencias…
A
los 4 mejores.
A
Nano.
Los peones salían presurosos de sus casas en la apertura de
la jornada, al comienzo corrían con grandes zancadas, después caminaban; los
más tardíos “comían al paso” 2-3 medias
lunas, café negro o un mate.
Cuatro caballos saltaban obstáculos, aquellas torres,
aparentemente inmóviles miraban el
horizonte desde su atalaya. Algunos se desplazaban raudamente por las
calles diagonales.
Los hombres y mujeres de poder pergeñaban sus estrategias, el
intercambio, las jugadas.
Al final de la tarde pocos transeúntes quedaban en la
cuadrícula de sus calles, a un cementerio cercano se mezclaban los negros y los
blancos…
Las blancas abandonaron…
La palabra ego significa YO en latín. En el
psicoanálisis de Freud es la “instancia psíquica que se
reconoce como yo, parcialmente consciente, que controla la moralidad y media
entre los instintos del ello, los ideales del superego y la realidad del mundo exterior” (RAE).12 ene 2021
“El yo no es dueño de su propia casa” Sigmund Freud.
El ego es una persona jodida y a la vez encantadora, una construcción
con distintos materiales y argamasas, obra con elementos objetivos y subjetivos
donde conviven ficción y realidad en una misma entidad. Cargada de identidades,
mandatos, culturas y experiencias; nombres que el mundo y los antepasados
inscribieron en la piel, símbolos invisibles tatuados en la dermis, y aquel
mapa familiar con los valores y disvalores de su historia…
El ego puede empoderarse hasta exagerar su fuerza o empobrecerse con las
mayores debilidades. Muy necesitado de algunas capacidades y aptitudes, entre
ellas: su falta de equilibrio y balances, la ausencia de interlocutores
válidos, la carencia de flexibilidad, la mesura en conjeturar y la incapacidad
de análisis, reflexión y crítica.
Esta instancia psíquica debería mirarse en el espejo pero como es muy
narcisista olvida sus defectos. Ahonda en monólogos para autopreservarse , no
escucha a otras y otros, y cuando escribe lo hace siempre en primera persona.
Es curioso lo que hacen algunos egos de convocar a informales reuniones
sociales para autoreferenciarse , dar a publicidad sus logros , a cultivar el
patético culto a la personalidad.
El citado personaje carece de humildad, por ello, no tiene necesidad de
cuestionarse, interpelarse o reaprender.
Cuando dos egos entran en conflicto las discusiones se transforman en un
campo de batalla, se lucha por un poder inexistente, a veces el combate es
perpetuo y el resultado final es que ambos pierden.
Para mejorar nuestra psiquis y nuestras relaciones el ego necesita otro yo
con quién hablar, alguien con quien pueda intercambiar sus narrativas dejando
de mirarnos el ombligo.
¿Y si lo que nos enseñaron en el colegio eran saberes
equivocados, si aquellas salas eran artificiales, una matrix de irrealidades?
¿Será necesario aprender y desaprender a juzgar por el
envejecimiento del conocimiento?
Observe como cambia el concepto si a alguna palabra en
singular la transforma en plural:
Verdad: verdades
Familia: familias
…
Cuando aceptas la espera se disfuma la impaciencia.
La primera fue un garaje de revistas y libros de canje.
Biblioteca rústica si las hay, con estantes hechos a mano, novelas policiales o
de guerra, revistas mejicanas, los
comics de Paturuzú, la Colección Robín Hood…
No recuerdo tanto la biblioteca de la escuela, tal vez haya
sido la segunda de mi historia, por ese tiempo era un principiante lector
anarquista. Prescriptiva, moralizante muy normativa, exageradamente pedagógica,
no invitaba a jugar, a esa aventura que necesita el cuerpo y el inconsciente.
La tercera fue la Vigil, un universo de sorpresas, y ese olor a nuevo que nos invita a viajar,
un templo de silencios, yo todavía sin saber que religión profesaba. Hallazgos,
asombros y aquella libertad de elegir.
La cuarta es la propia, elecciones caóticas, algunas
racionales, regalos, algún libro transitorio que me prestaron, libros que
esperan y otros que se compran religiosamente todos los meses.
Chapa y pintura
fondo y forma
batata y queso
urdimbre y trama
limón y chocolate
lectura y escritura
…
“…Entre los libros
de mi biblioteca (estoy viéndolos)
hay alguno que ya nunca abriré.” Jorge Luis
Borges
A la espera de mis ánimos
de los humores que provoca la luna la lluvia
o las mareas en algunas vacaciones
aguardan con paciencia
la madurez de mis inquietudes
el despertar de una búsqueda curiosa
con algunos he llegado
a la orilla de sus océanos
al borde de sus márgenes
juntos en una esquina
de mi biblioteca
se apiñan en un rincón
al sur de la poesía
al oeste de las novelas policiales
al norte y el este de la historia el derecho y la moral…
tal vez haya perdido el verso inolvidable
el cuento perfecto la novela más bella
la palabra luminosa
Ritmos y leyes
flores de lapachos
antes ocres
de amarillos
de nieblas y noches
a estos soles
esas alternancias
de fríos y calores
todos amores
Sin que sea una cuestión de género, hombres y mujeres se
dividen en sus predilecciones, están quienes prefieren los números a los que se
inclinan por las letras.
También podríamos notar esta división en quienes profesan
simpatías con los “Famas” a diferencia de los “Cronopios” (Cortázar).
Algunos se sienten identificados con los “Refutadores de
leyendas” y otros con “Los hombres sensibles de Flores” (Dolina).
Tampoco es casualidad que haya autores que distingan las “Ciencias
Duras” de las “Ciencias Blandas”.
En política se separan las “derecha-s” de las “izquierda-s”.
…
Las grietas predominan en todos lados, por ello se caen todas
las construcciones que hemos edificado.
Yo no creo que el destino esté escrito de antemano, creo, eso
sí, que se escribe mientras andamos.
Aunque el azar juega sus dados, o a la taba, o a las cartas o
a esa moneda que anda flotando por los aires…
“Si te conoces a ti mismo, Creso, realizarás la travesía
felizmente.”
Todo es movimiento y cambio. Los hechos son infimitos, los
jugadores y los modos de jugar también.
Con oráculos o sin ellos uno decide lo que es y lo que hace,
con los límites que impone lo humano.
He buscado el origen y la historia de esa palabra que tiene
sus bordes afilados. La escribo desde la
“tierra de nadie”, es decir desde los márgenes, no para excederme de los
mojones de mis propiedades sino para mirar el territorio, la extensión de mis
escasos dominios, mirar con cierta perspectiva mis expectativas y necesidades, encuadrar el paisaje según la circunstancia de
las etapas vitales de los tránsitos.
El área de mi influencia no llega más allá de mis manos. El
cuerpo necesita la columna recta y estable, la rodilla no puede ir más lejos
que los pies y los pasos tienen la medida de su alcance.
Despojado de los extremos, es decir de las omnipotencias y de
las impotencias me someto a la vulnerabilidad de lo humano como la medida de lo
que puedo y no puedo hacerme cargo.
Al poner mis propios límites impongo también como quiero que
me traten.
Entre la simpatía y la antipatía está el sendero de lo
intransitable, pasar aquella línea es entrar en un espacio ajeno, entrar en una
propiedad que no nos pertenece, es la casa del otro o de la otra.
En estas cuestiones de la vida no se gana terreno chocando y
empujando, en esto no se puede correr hacia adelante.
En el sentido amplio la salud es el límite de lo humano, y
esto abarca lo físico, lo emocional y lo mental. A veces aquella frontera es
imprecisa, más es vital y necesaria para preservar nuestra integridad a veces
coherente y a veces lastimada.
Somos cuerpo y somos mente y más, mucho más
los sentidos son las puertas de las emociones
semillas que sembramos en los campos fértiles de la paciencia
necesitado de silencios y de la oscuridad de la tierra
también de esos soles
que miran aquellos territorios
germinan después de un tiempo con la lluvia
se escriben con alguna resaca de lápices en el suelo
después de algunos
bollos de papeles tirados en los rincones
abierto el consultado oráculo de un gordo diccionario
alejado de las labores de los motores y de las estridencias
de la radio
con su mano invisible el sueño escribe sus notas
la deja en la libreta de nuestras duermevelas
de-vela lo que la conciencia ignora
debajo de los umbrales sopla el inconsciente
frases luminosas fragmentos impensados del juego de las
letras
símbolos de un rompecabezas que en pieza a pieza se arma y se
des-arma
en el bostezo de la mañana un collage surrealista
descifra la poesía y
desnuda los disfraces
Pintó de blanco el cielorraso
y no se le ocurrió nada
una blanca hoja de silencios
esperaba su palabra
Credulidad y cinismo son dos extremos peligrosos. No se puede
vivir creyendo todo o no creyendo nada.
***
Tenemos exhaustivo registro de lo que nos dicen los demás
sobre lo que no nos gusta o lo que nos
duele, pero no tenemos igual registro de lo que decimos nosotros.
***
Cuando uno empieza a decir “NO” acepta sus límites y
establece los andariveles por donde transita su vida.
***
Cuando las ideas y las emociones no se ponen de acuerdo,
juegan al ajedrez para tomar sus decisiones, entre las posibilidades a veces se
puede acordar “tablas”.
***
Definiciones: hacer una lista de “SI” y una lista de “NO”.
***
Es importante tener claridad en dos respuestas a las siguientes preguntas: ¿Por qué? Y ¿para
qué?
Con un pincel aparto los depósitos de tierra
la hojarasca que cubren los hallazgos
paciente y confiado paso las horas
todavía no encuentro las palabras
el polvo oculta las claras evidencias
la emoción mientras tanto vive
late, respira, se siente, se mueve…
espero que sedimente el agua turbia
buceo en aquellas percepciones
en esas soledades el
sueño devela una imagen
deambulo en el laberinto imaginario
descubro algunos símbolos
en la duermevela de alguna mañana
una palabra despierta inquietudes
con ese vocablo construyo un verso
más tarde describo lo que me pasa
y lo difícil se aclara
Escribo en la penumbra de la noche
en la neblina de aquella mirada
sobre las sombras las blancas letras
en aquellos aparentes desperdicios de las horas
los versos claros en
biorritmos alterados
ensayando colores mezclando oleos
en la paciencia de los tiempos
lejos de los
cansancios
desparejas las líneas de los renglones
la extraña geografía de algunas letras
las blancas hojas del cuaderno
en ese territorio de los silencios
a pesar de los vidrios ahumados
de los opacos
cristales
de los esmerilados lentes
del humo ceniciento de las islas
se ordenan las palabras se aclaran las pasiones
acepto al fin la lluvia el viento y el sol de mis momentos
acepto este agosto frío que espera acepto las estaciones
sin ellos no hay barquitos de papel, girasoles, desvelos ni
amores
Difumada la imagen
el poeta busca tocar el cuerpo de su letra
oír la viva voz de su pertenencia
ver a través del
etéreo humo
la impecable claridad de la palabra
sentir el perfume de la lluvia
en el surco labrado del renglón
saborear en tertulias aquellas sobremesas
con amantes de la conversación
Aquí y ahora la vista fotografía en su “cámara lúcida” (*) lo que ve. Me pregunto: ¿Qué intensiones ocultan los ojos? ¿Qué ad-miran? ¿Guardan algunas miradas aquellas imágenes?
El gusto es más categórico, “me gusta” o “no me gusta”. Tal
vez también lo sea el olfato ¿Dónde está ese olor que percibe lo cercano y
recuerda lo lejano? ¿Qué palabras lo definen?
Toco las superficies lisas y redondeadas, rechazo los bordes
ásperos y afilados. Terminante puede ser lo que escucho, “agradable” o
“desagradable”.
La mente finalmente describe, interpreta y hace su narrativa
a través del lenguaje según sea el
personaje.
(*) “La cámara lúcida” Libro de Roland Barthes
cuando no alcanza la presencia
cuando no alcanza siempre estar
cuando no alcanzan los de siempre
cuando no alcanzan los esfuerzos
cuando no alcanzan aquellas intensiones
cuando el amor no alcanza
cuando nada alcanza
sostener tu cuerpo, tu
mente
y los que algunos llaman alma
el viento del tiempo
intenta llevar tu voz
a sus confines
más yo tengo tu letra viva
¿qué ha quedado de ti en mí?
el olor de la mañana –tu cocina-
aquellos quehaceres
la alquimia de tus ñoquis
la gran mesa tendida
los mates de esas tardes
los pulóveres en la trama
silenciosa de tus lanas
entretejiendo amores
meditando tus mantras
las frases mano escritas
aquellas célebres que apuntabas
aquella bonhomía de tus cosas sencillas
“Si
no te alcanzó con mí presencia, te ofrezco mi ausencia.”
Anónimo
o desconocido.
tal vez por aquellas intemperies
escribo
tal vez por aquellas precariedades
esta osadía
tal vez por aquel desierto
este oasis
tal vez porque enseño
aprendo
tal vez por esos interrogantes
estas conjeturas
tal vez por algunos amores
estos desvelos…
Ensayo de Collage.
Título; Tertulias
Poemario: Tertulias
I.
Conversatorio
Esas palabras
recuerdan los olores
de aquel café
II.
Coordenadas
Bar El Ateneo
jueves 5 a las cinco
llevar un libro
III.
Servilleta
En borrador
escriben esos poetas
germinan letras