viernes, 24 de abril de 2020

Tibieza.



                                    A Graciela.

me quedo en los lugares
que sueles entibiar
en los olores invisibles
que hay en tus almohadas
en las palabras indecibles
que hay al costado de tu cama
y yo solo aquí con un ramo
de palabras…

martes, 21 de abril de 2020

Presente.




                        “Si la acción en cualquier sentido conduce a empeorar las cosas,
                        dejarlas como están es la única manera de que mejoren naturalmente.”
                                                                                                          I Ching. (La espera)

Disfumado en la neblina
en el humo ceniciento
en esa nube que cambia
así ! así es este presente
me quedo aquí en este ahora
en la mirada más cercana
de mis ojos…



jueves, 16 de abril de 2020

Infectados.



He salido  muy pocas veces de casa, en estos períodos de cuarentena extendidos y prolongados hasta que el coronavirus lo disponga.

Observo que las llaves de mi casa (un privilegio en estos casos)  se han oxidado, tal vez por el escaso uso que les he dado en estos veinticinco días, o quizás  por haberlas desinfectado repetidas veces con el brebaje confeccionado con  nueve partes de agua y una de cloro.

Entre mis variados temores, tan clásicos en estos inusuales períodos, no dejo de pensar si algún solitario virus del covid-19 se queda entre mis manos  y avanzando en conjeturar su destino, si el mismo se alojara en las hojas del libro que noche a noche leo y hojeo en mi cama. No quisiera imaginar que le podría pasar a mi biblioteca a juzgar por su capacidad de contagio.

Imaginen ustedes que destinos tendrían los personajes de aquellas novelas, como cambiarían  sus vidas y  sus muertes, y a mí, que de alguna manera he sido testigo de aquellas experiencias, ya que  de alguna manera también he vivido con ellos a través de la lectura.

martes, 14 de abril de 2020

Cara o cruz.




El caos y el orden juegan a los dados
a veces a las palabras cruzadas
al ajedrez, al buraco, a la taba
a los pares o los impares

el caos prefiere los juegos de azar
el orden los juegos matemáticos
gemelos compulsivos
siempre buscan la eterna revancha

domingo, 12 de abril de 2020

Segunda cuarentena.




Hay un lugar y un no lugar
un tiempo y un no tiempo
cuando las leyes de mundo
se mantienen en suspenso

sólo en un lejano afuera
el otoño mantiene sus colores
costumbre de las estaciones

me parece extraña
esa calle calma
de feriados eternos
y domingos prolongados

un silencio de máquinas y autos
los relojes aburridos
despedidos del trabajo

y este insomnio perenne
que se entretiene
buscando palabras del diccionario

¿ es posible decirle a la abeja
que no haga su tarea?

¿Qué no cante el pájaro
cercano a mi ventana?

¿qué el día y la noche
cambien sus hábitos?

todo es igual
y todo ha cambiado
lo temible
es lo habitual y lo extraño

un escritor obstinado
no puede dejar de caminar
por el renglón en blanco

viernes, 10 de abril de 2020

Límites y duelos.




                        Aceptar que no se está capacitado para una determinada acción,
                        es no desperdiciar las energías que pueden ser canalizadas en los
                        objetivos para los que uno está preparado.    I Ching.

Hay territorios que están prohibidos  a mis pasos
ya no los niego ni tampoco lucho con sus enfados
en capacidades y carencias  he nombrado a un mediador
tan simple y tan obvio la condición de ser humano

tal vez no entendamos esa distancia
la diferencia de  lo que somos y no somos
en el libro gordo de  los años
hay un capítulo de arena de esa paciencia

tal vez por las ausencias se manifiestan los humores
caminar por las veredas del otoño
el abandono de aquellos soles
las pérdidas de nuestras charlas

el café que se demora
el viaje suspendido de los abrazos
aquel proyecto postergado
y el cuerpo necesita los contactos…


y en estos dolores
tenemos comunes aflicciones
y a su vez reaccionamos
de distintos modos

miércoles, 8 de abril de 2020

Ser. (versión borrador)



                          
Aquí y ahora
hacer sentir y pensar

madeja compleja
realidades y sueños

desde las primaveras
hasta los inviernos

el centro
del universo

paradojas de lo pequeño
y de lo inmenso

lo vacío
y lo pleno

todo convive
en suspenso

lunes, 6 de abril de 2020

Ejercicio de Escultura

Título: Ser
Materiales: madera, metales, alambre.

domingo, 5 de abril de 2020

¿Sueño?



                                               Rosario, primera semana de abril 2020 (Cuarentena).

Como soy un defensor del psicoanálisis reparé en la importancia de haber soñado y traté  de no olvidarlo. No es casualidad que en esta época sueñe tanto.

Estaba en la planta baja  de un gran edificio. En mi ciudad, ya empiezan a crecer algunas torres de cemento con muchos pisos, oficinas y apartamentos varios.

Llegó al fin el ascensor, y subí casi mecánicamente a él, toque el botón del piso 32 o 33, tal vez fuera otro, y mientras subía empecé a reparar en él.

El cubículo era estrechísimo, apenas cabía, una caja en movimiento, un prisma que subía silenciosamente, mi nariz casi tocaba la puerta.

Empecé a transpirar, lo noté en las manos, la garganta seca, algunas gotas de sudor ya caían por la frente.

La piel de la cara se ruborizaba, el metal brillante y opaco de la puerta hacia de espejo, a unos segundos ya estaba roja, todo el cuerpo emitía calor.

Sentí una opresión en el pecho y los  músculos de la espalda estaban con grandes contracturas y dolidos por él desgaste y la tensión.

Sentí el ritmo cardíaco acelerado, la respiración alterada, la inmovilidad de mi cuerpo contrastaba con el movimiento agitado de mi interior.

Quería salir de mi propio cuerpo pero estaba encerrado.


El sueño era raro, como casi todos los sueños.

El control luminoso pasaba los números de los pisos, me decía a mí mismo – ya llego, ya llego!!!-
De pronto noté que ya había sobrepasado el piso 35 y el ascensor no se detenía y continuaba en el ascenso.

El miedo aumentaba y ya casi llegaba a la categoría de terror.

Ya había llegado al  el piso número 100 y continuaba…y continuaba…
fue en ese preciso momento en que  me desperté…

viernes, 3 de abril de 2020

Con lo que tenía.




“…Mi padre, constructor de cuchara en mano, a quien yo servía de peoncito en mis horas libres, solía encontrarme detrás de pilas de ladrillos tocando la serenata de mi soledad, con un violín de dos palitos secos…” Autobiografía de José Pedroni.

Con desperdicios de  caños, alambres y maderas
intento darle una forma de sentido a un proyecto de escultura
ejercicio al fin de mis precarias aptitudes y destrezas

escribo en borrador al dorso de algunas hojas
-se me ha terminado el extra blanco A 4-
es otro talismán que encuentro a mano

con un poco de cebolla y  dos dientes de ajo
puedo hacer el guiso con aquellas viejas lentejas
sin que sea necesario alguna extraña salsa

si no hay café bien vendrá el mate
aún tengo jabón y agua
pero no todos son afortunados

a veces  no hay casi nada

miércoles, 1 de abril de 2020

Imágenes.




Trato de ver desde esta ventana opaca
mis cosas más vitales
miro esa neblina de emociones

buscando esculpir unas palabras
no es más que un refugio aquel hallazgo
en mi taller virutas hay por todos lados

agnósticos fragmentos de  oraciones
glosarios blancos
lápiz de carpintero en una mano

mi mente ordena sus garabatos
en mis afanes cada dos, tres o cinco días
otra inquietud desordena el  diccionario

los ingrávidos pesos
los sutilices goces
la sustancia


desde mis umbrales siento
que el viento lleva y trae
serenidades y pesares

el cuerpo se contrae y se relaja
aquellos tonos: resistencias, caricias
y algunas normalidades

sabores agridulces
olores mezclados
armonías y disonancias…