sábado, 27 de julio de 2019

A tientas.




                        “Manotean en la oscuridad” . Mario Marquet Actis.

Si supiéramos  que algunas preguntas son incógnitas perpetuas
con ellas ahorraríamos ingentes cantidades de energía y algunas obsesivas insistencias.

Tal vez se deba a una necesaria cuota de humildad, que por momentos
escasea, y a esa olvidada capacidad de  abandonar  nuestra ilusión de omnipotencia
que no implica caer en el antónimo de la  impotencia.

Siempre habrá algo que no sepas, algo que  no alcances,   algo  que no
puedas  algo que no quieras, independiente a nuestras fuerzas.

A veces los humanos debemos afrontar ese andar –no siempre elegido- de
andar a tientas.

martes, 23 de julio de 2019

El cuerpo tiene la palabra.




Hay  una relación corporal con las palabras, a ellas les ponemos nuestro cuerpo, cuando se desgastan es por la incoherencia de nuestras acciones, es decir de nuestros  actos. 

Nuestro andar por el mundo sostiene o empobrece nuestros vocablos, el decir y el hacer van de la mano. Leer y escribir tienen parecidos hábitos, propiocepción del cerebro y de las manos.

Están aquellas que vibran en tu piel y son  fuentes de energía, son las que te dan calor o frío, sudores o escalofríos.  Algunas invitan a los abrazos y otras a los rechazos.

Las palabras apelan a los sentido-s llevan perfumes, también  olores rancios. Se visten de colores a gusto de quien las viste. A las claras deberíamos incorporarlas  y a las oscuras no darles tanta importancia.

Como especias hay dulces y saladas, picantes y amargas. Algunas saben de acrobacias  y saltan por los aires, libres con el que se anima a llevarlas, hay lisas y ásperas.

¡Escuchad como cantan!

domingo, 21 de julio de 2019

Álbumes de fotos.




El peso arqueaba los estantes, cientos de fotos ocupaban los espacios y al hojear aquellos álbumes observamos, retratos e imágenes que no correspondían cronológicamente, fiestas, viajes, encuentros y eventos que se mezclaban, instantáneas fueras de encuadre, algunas movidas, varias repetidas  y otras con nitidez escasa.

Era hora de hacer la antología de aquellos momentos esenciales ¿qué fotos conservábamos? ¿Cuáles descartábamos? ¿Qué criterios de selección teníamos en cuenta?

Entre tantas reproducciones había personas que desconocíamos, un amigo de un amigo con quienes compartimos unas vacaciones, algunos invitados a alguna fiesta no tan cercanos, unos paisajes que en el soporte papel no mostraban la belleza que habían retenido nuestros ojos, y nuestro arte precario que no siempre captaba el mejor ángulo, la mejor luz o la mejor distancia.

La tarea no era sencilla y escondía  simbolismos más profundos ¿Qué recordamos? ¿Qué olvidamos? ¿Qué cosas de aquellas historias debemos dejar partir? ¿Cómo sanamos, valoramos o reconstruimos aquellos tránsitos? ¿Hacia dónde está orientada nuestra temporalidad?

Las fotografías nos interpelan y ellas no envejecen, con las estaciones  que pasan nosotros las miramos, con otros cuerpos, otras mentes. Las estampas se mantienen –como mármoles sus estatuas- mientras nosotros aquí y ahora somos una danza, cuerpos y movimientos en nuestros espacios.

Después de un trabajo paciente y constante aquellos compendios de tomas e ilustraciones reforzaron nuestra memoria episódica, ampliaron la conciencia del devenir, y como no puede ser de otra manera las imágenes acompañaron a las palabras.

sábado, 20 de julio de 2019

Historia-s.




¿Quién ha escrito en nuestro cuerpo
ese signo de dolor o esa disposición a la alegría?
re-escribo aquella historia de nombres invisibles
con mi propia letra hago responsable
a cada cual de sus miserias o  las mieles  de sus obras

mi cuerpo que gime y ríe
en la conciencia del devenir
libera del pasado las historias
que no le pertenecen
y guarda para sí sus construcciones

lunes, 15 de julio de 2019

Relato-s.




Los plurales y los singulares
son más amigables que los antónimos y sinónimos
a estos últimos los escucho en los encarnizados debates
a diferencia de los primeros tan  propensos al diálogo
hacen un arte  de la singularidad y la  interdependencia
una especie  de ecología de la lengua

miércoles, 10 de julio de 2019


Des-orden.

De tanto en tanto hacemos algunas pequeñas mudanzas en nuestro departamento, algún mueble que encuentra  otro espacio, el remplazo de un espejo que ha perdido sus brillos, una planta que necesita más el sol, una foto que se ha cansado de mirarnos, y entre otras cosas,  algunos libros apiñados en el escritorio, en las mesitas de luz, en alguna caja o en los estantes.

No sé a ciencia cierta si la biblioteca se ordena o se des-ordena con tantos traslados, a simple vista los libros están alineados como soldados en sus espacios reservados, la mayoría en posición vertical y unos pocos horizontales.

Es extraño que la biblioteca guarde para sí ese silencio inteligente de los lugares sabios y sagrados aunque las posiciones de sus autores sean  en varios casos tan dispares.

Revisando las cercanías y vecindades Nietzsche y Platón estaban junto a Kawabata y Saramago, los temas también se mezclaban “La sexualidad femenina” y el “Tao te King”, “La rebelión de las masas y “Historia de una biblioteca” “La nueva psicología del amor” con Tomás Moro y Maquiavelo, “La inteligencia emocional” y el “Mundo de Sofia" , Bateson y Freud con Sabato, Borges, Arlt y Bioy Casares, entre otros.

Me temo que de ese universo surja otro Big Bang, pero estoy predispuesto a sentir y a pensar que el caos se ordena y el orden solo es una quimera.

jueves, 4 de julio de 2019

Una pequeña historia de la piel.




he inventado tatuajes invisibles en tu piel
jugando con los lápices de mis dedos
-aún no he pensado en sus colores-
barquitos de papel
un símbolo oriental
una clave de sol
la cinta de moebius
mis deseos en estenografía
con algunos errores de mis signos
aquellas palabras de pasiones claras
-las oscuras me despiertan a la madrugada-
todo ello  en aquellas especiales ocasiones
en que se demora la mañana
la caricia es una estela
que queda en el océano de la memoria
después el cuerpo da cuenta
de esa historia

lunes, 1 de julio de 2019

Territorialidad.




Aquella tierra no estaba ocupada
nadie había invadido nada
ningún indicio de guerra o conquista
ningún descubrimiento
ningún título de pertenencia
ningún cruce de espadas

algunos girasoles habían crecido
semillas del viento que pasa
sobre aquel privado espacio
construyeron su casa
sintiendo, siendo y haciendo
en el devenir de las circunstancias

el buen clima y aquellos soles
ciertas  osadías sin famas
sosteniendo el horizonte
en cada una de sus miradas
perseverando en las labores
y en aquellas palabras