A veces tomo café a solas con mi silencio.
Dependo de un lápiz y un papel para pensar.
La mente no es el cerebro.
He sembrado una flor imaginaria que aún no se ha
marchitado.
Cuando mueren las palabras mueren aquellas cosas
que antes se nombraban.
Perder esa frase es como perder ese instante.
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