Busco las heridas que no se ven
la verdad al igual que una flor
germina asciende lentamente hacia la luz
la espina y la rosa
no es una paradoja
cada una tiene su historia
ni paraíso ni infierno
la vida es una compleja madeja
de pequeñas y sencillas cosas
uno quiere olvidar los dolores primeros
las heridas profundas e iniciales
simula esquiva esos emocionales golpes
algo alguien uno mismo ha cortado
la sensible fibra más oculta
y el órgano fantasma persevera en sus
espasmos
la sangre no olvida
aquel cristal de dolor
más tarde una lágrima abundante
conciencia tardía de un acto
allá adentro adentro
recuerda el primer llanto
madurado en lo profundo
la palabra justa la palabra exacta
será lo que te sana
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