domingo, 20 de noviembre de 2011

De tanto en tanto.

“La poesía es un árbol sin hojas que da sombra” Juan Gelman.



De tanto en tanto dejo abierta las puertas de mis ojos
engrasando los quicios de sus cejas
para ver el claroscuro de los ánimos

De tanto en tanto levanto el puente levadizo
para que entren en tropel los desamparos
y así vengan y vayan los tuyos y los míos

De tanto en tanto lijo los umbrales de madera
para atemperar mis asperezas,
en la comedia y la tragedia de los tránsitos

De tanto en tanto limpio el rincón de los murmullos
para que no aniden telarañas con gritos de silencios
dar y recibir aquellas voces –esos puentes que me invento-

De tanto en tanto practico la ruptura de mis versos
para no repetir anomias ni desidias de los tiempos
sacarle la punta al lápiz y volver con otro viento

De tanto en tanto salgo a correr con mi ignorancia,
tomo café con mis verdades, sabiendo que no puedo ir
más allá del alcance de mis pies y de mis manos

De tanto en tanto no insisto, no empujo, no me obligo,
no hago lo correcto, desaliento ambiciones y lento
me satisfago en lo pequeño

De tanto en tanto dejo que el sol suba
alumbrando más el paisaje de mi alcance
así puedo mirarme y mirarte

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